Así que entonces lo entregó a ellos para que fuese crucificado. Y tomaron a Jesús y se lo llevaron. Y Jesús, cargando su cruz, salió al lugar llamado de la Calavera, y en hebreo, Gólgota, donde le crucificaron, y con él a otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio. (Juan, cap. 19, 17-18).
Y estaban junto a la cruz de Jesús su madre, y la hermana de su madre, María esposa de Cleofás, y María Magdalena. Y cuando vio Jesús a su madre y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo. Después dijo al discípulo: He ahí tu madre. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su casa. (Juan, cap. 19, 25-27).