Mañana, como prólogo al Solemne Triduo que iniciaremos el miércoles, la Hermandad celebra uno de los actos más emotivos e íntimos de los que podemos disfrutar a lo largo del año. Se trata de ese momento especial y único e irrepetible en el que la Hermana Mayor, acompañada de su familia, «echa» a Jesús Nazareno la Túnica que va a vestir durante los cultos cuaresmales. Momento de oración, de emoción, de sentimientos a flor de piel y de una profunda alegría por poderlo vivir ante la Bendita Imagen de Jesús Nazareno sintiendo su humanidad y, a la vez, su divina cercanía a nuestros corazones.
Jesús Nazareno me permitía estar. BENDITO ACTO. BENDITA ORACIÓN. BENDITO MOMENTO.
Gracias a quien lo ha hecho posible.