En una espléndida tarde de Domingo de Ramos, la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén inauguró los desfiles de nuestra Semana Santa con una no menos espléndida Estación de Penitencia en la que los niños volvieron a ser los protagonistas principales. A las 17’30 se abría el portón de la salesiana iglesia de María Auxiliadora para dar paso a la Cruz de Guía, acompañada por la Banda infantil de los Sayones, y al resto del cortejo. El Señor, magníficamente portado por hermanos costaleros y acompañado por las notas musicales de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús Nazareno de Villanueva del Duque, se paseó triunfante por las calles de Pozoblanco transmitiendo la intensa alegría de los niños que caminaban con él. Ojalá esta primera jornada de buen tiempo sea preludio de una semana en la que todas las cofradías y hermandades puedan realizar sus desfiles sin novedad para dar testimonio de fe y devoción a sus respectivos titulares.