Cuando el Padre Pedro Meca nos visitaba a principios de este año -recién finalizada la Navidad-, nos contaba que cada Nochebuena él y otros ciento cincuenta voluntarios preparaban una cena para más de quinientos «sin techo» de los que sobreviven en las calles de París, cena en la que intentaban que estas personas se sintieran arropadas por la compañía y el calor de todos esos voluntarios. Nos decía que era costumbre también que cada una de estas personas tuviera, junto a su plato, una tarjeta de navidad con un mensaje de cariño y de esperanza y destacaba la alegría con que las recibían pues daban a este gesto -para nosotros tan sencillo- el valor de lo que nunca habían tenido además de constatar que otras personas habían pensado en ellos en esa noche tan especial, no en vano esas tarjetas habían sido hechas una a una por niños y adultos tanto de Francia como de otros lugares del mundo.

DSC_0598-crop

Pasados los meses, y según nos hemos ido acercando de nuevo a las fechas navideñas, se planteó en la Junta de Gobierno la posibilidad de que este año esas tarjetas fueran enviadas desde Pozoblanco hechas por los niños de nuestros colegios. Y, en efecto, así ha sido ya que a principios de esta semana se han enviado al Padre Meca las que han hecho los niños cofrades de nuestra Hermandad, los del Colegio La Inmaculada y alguna que otra persona mayor con el cariño, la calidez y la solidaridad de aquéllos que entienden que se puede hacer mucho con muy poco.

DSC_0639

No podemos dejar de mencionar que, junto a estas tarjetas, los «sin techo» parisinos recibirán otro regalo de un lugar muy distante al nuestro. Se trata de «ciervos voladores» hechos por niños de la calle de Kabul, capital de Afganistán, país en el que, como todos sabemos, están viviendo unos tiempos especialmente duros por la guerra y el terrorismo que lo asola.

Reproducimos a continuación parte del mensaje que nos envió el Padre Pedro Meca respondiendo al que le mandamos confirmando que las tarjetas, alguna de las cuáles ilustra esta noticia, estaban en camino.

¡Qué alegria al leer vuestro mensaje!
Muchas gracias por acordaros de Nuestra Navidad que organizo para las personas de la calle. Entre invitados y voluntarios estaremos cerca de 650 personas. Sentados en la mesa 500 y los demás preparando los platos, sirviendo, etc.
Mucho trabajo pero vale la pena proporcionar un momento de alegría a las personas solitarias y en la calle.
Los niños de la calle de Kaboul han fabricado ??ciervos volantes? que nos los traerá una amiga. Qué bien que los peques de Pozoblanco y Kaboul estén juntos con nosotros gracias a su habilidad y solidaridad con las personas de la calle.
Que paséis una feliz Navidad. Un abrazo a todos y cada uno.
Pedro Meca

Christmas