Después de un magnífico día de romería y de un agradable camino de regreso, la Virgen de Luna fue recibida en Pozoblanco con todos los honores de Patrona y Alcaldesa Perpetua. Imponente la vista de la explanada del Santuario -libre de puestos- desde la Cogochuela, impresionante el número de romeros e inmejorable el ambiente que reinó durante toda la jornada. La apoteósica entrada de la Madre en la iglesia de Santa Catalina culminó una jornada festiva que nos trajo la inmensa alegría de tener a la Señora de Luna en nuestro pueblo durante los próximos ciento cinco días.
La Virgen de Luna a su paso por el Ayuntamiento de Pozoblanco
