La Imagen de Jesús Nazareno ya está en el presbiterio de su Capilla.
Como todos los años, el primer jueves de la Cuaresma, Jesús Nazareno se acerca a sus devotos. Colocada ya su Bendita Imagen en el presbiterio de la Capilla, espera su visita, más cercano, más humano, para acoger amorosamente sus oraciones y sus cuitas. Ahí recibirá culto hasta que sea entronizado en nuestro paso procesional. Ahí se llenará de miradas agradecidas. Desde ahí verá corazones abiertos de par en par, rotos por el dolor, pidiéndole que no los deje abandonados. Desde ahí llevará el consuelo a cuantos vayan a pedírselo con la fe y la devoción que nos dejaron nuestros mayores.
Empieza la Cuaresma y Jesús Nazareno se baja, humilde, aun a sabiendas del destino que le espera. Sin embargo, también sabe que resucitará al tercer día y que, con su resurrección, nos enseñará el camino a la salvación. Disfrutemos de esa cercanía visitándole para pedirle la ayuda que cada uno necesite pero también para agradecerle lo que nos da cada día.