Hay hechos que, por mucho que se repitan, no dejan de tener un inmenso valor y, si además, nos sirven para reafirmarnos en el camino emprendido y nos producen una íntima y sincera satisfacción, ese valor se multiplica con creces. Eso, y no otra cosa, experimentamos la noche del viernes, día 12, en el acto celebrado por los Hermanos Costaleros de nuestra Hermandad.
Convocados por el equipo de capataces, y con la asistencia y apoyo de la Junta de Gobierno, respondieron de manera ejemplar a esta cita que supuso un feliz reencuentro después de un año tan duro como el que todos estamos viviendo. La alegría de volver a reunirse delante de la Bendita Imagen de Jesús Nazareno se hacía notar en todos los presentes, la satisfacción por compartir juntos este rato era patente y, todos juntos, dimos gracias al Padre Jesús por permitirnos vivirlo y rezamos pidiéndole por los compañeros que lo están pasando mal y los ojos de más de uno se nublaron pensando en alguno de estos que había querido estar presente en la Capilla como uno más.
Y como se les había anunciado en la correspondiente citación, hicieron sus aportaciones para el «Costalero Solidario», más de 500€ que irán a Solidaridad Puntual, y aprobaron el destino del donativo anual que será para Cáritas Interparroquial de Pozoblanco. Como alguien de los que intervino dijo: «costaleros todo el año, ayudando al que más lo necesita, dentro y fuera de la trabajadera». ¡Gracias Hermanos Costaleros por ser así de grandes!
Damos las gracias también desde aquí a nuestro Consiliario, a la Vocalía de Cultos y a los Hermanos que intervinieron por preparar con tanto esmero y cariño este sencillo pero tan intenso acto prólogo de la nueva cita que tendrán el Martes Santo.