La voz de la lectura, en esta ocasión, la puso Miguel Ángel Cabrera, quien acudió solícito a la llamada de los Ancianos de Jesús Nazareno, acompañándolos, arropándolos con su personalidad cálida, cercana, entrañable, y con sus narraciones de cuentos leídos en el libro titulado «Cuentos de Los Pedroches», que escribió su buen amigo Juan Bosco Castilla por ofrecimiento de la Fundación Ricardo Delgado Vizcaíno.
La voz de la tradición oral: a Juan Bosco le contaron los cuentos las personas mayores, asegurándole éstas que se los habían oído contar a otras personas mayores cuando ellos eran jóvenes… y, así, él pudo «guardarlos» como un tesoro; y escribirlos, en el año 2001, para que no se perdieran definitivamente.
Y, Miguel Ángel, con su voz ancestral nos leyó, entre otros, «Sueños de fortuna»: Un pedrocheño soñó tres veces con una voz que le decía: «Si vas con aceite a Porcuna, encontrarás la fortuna»…
… Entonces, ¿sabéis lo que pasó? Pues que los Ancianos se pusieron manos a la obra a recordar los cuentos y leyendas que Ellos tenían atesorados en su memoria. Y es que Ellos sí que son «libros abiertos» a los que sólo hay que escuchar.
Tenemos un ejemplo, que viene al caso citar: hay en la crónica del Grupo de Lectura del Santo Hospital (22 y 29 de Octubre) dos comentarios, que agradecemos. Uno de ellos, escrito probablemente ayer, día 5, o esta mañana, antes de esta crónica, es un claro ejemplo de aprendizaje y de transmisión oral de abuelos a nietos. Se trata de una poesía bellísima: «Oración: La Virgen Pura», que, al firmante del comentario, Manuel Benítez Moreno, le enseñó oralmente su abuelo Miguel Moreno García (q.e.p.d.) Léanla en el blog, un poquito más abajo (comentarios).
Y damos las gracias, sinceramente, por las colaboraciones.